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Se acercan las Navidades y, aunque este año serán un poco diferentes, sin duda todos tenemos muchas ganas de disfrutarlas en familia y con todas las tradiciones típicas de estas fechas. El 6 de enero es el día que todos los niños esperan con gran ilusión y también la fecha navideña en la que aumenta de manera exponencial la elaboración de Roscón de Reyes, un dulce imprescindible que siempre gusta a niños y mayores.
La tradición de comer Roscón de Reyes el 6 de enero se remonta al siglo XVII en Francia y llegó a España con el reinado de Felipe V. En aquella época se introducían en el postre habas y monedas de oro como símbolo de abundancia. En la actualidad, la tradición del haba se ha conservado, aunque en vez de monedas se introduce alguna figura pequeña de cerámica relacionada con la Navidad.
El Roscón de Reyes tiene forma circular u ovalada y se suele rellenar de nata, trufa o cabello de ángel, aunque también se elaboran sin relleno o con la nata montada aparte para que cada comensal se sirva a su gusto. Se venden con diferentes tamaños para adecuarse a las necesidades de las familias, por ejemplo para 2, 4, 8 o 12 personas.
La principal seña de identidad de este dulce son los trocitos de fruta confitada o escarchada en su superficie con sus vivos colores, normalmente rojo, verde y naranja. Las tiras de frutas que se emplean suelen ser melón, calabaza, naranja, cereza o sandía. A todas se les aplica un tinte especial para presentar ese color tan intenso.
Elaboración del Roscón de Reyes con fruta escarchada
Los profesionales y las pastelerías tienen todo preparado para comenzar la elaboración del Roscón de Reyes en las próximas fiestas. Estos son los pasos principales para su fabricación, aunque muchos reposteros pueden cambiar o modificar algunos pasos para aportar un toque de innovación o diferenciación.
Estos son los ingredientes:
- Huevos
- Harina de fuerza
- Mantequilla
- Leche
- Levadura fresca
- Azúcar
- Sal
- Agua de Azahar
- Frutas escarchadas
Paso 1: amasando el Roscón.
Se introducen en la amasadora los huevos, la harina de fuerza, la leche, la sal, el agua de azahar, el azúcar, la mantequilla (a temperatura ambiente) y la levadura fresca y dejamos que la máquina haga su trabajo. El proceso dura aproximadamente 15 minutos y se obtiene una masa compacta y homogénea.
Paso 2: dando forma a la masa.
La masa compacta se traslada a una mesa lisa enharinada y se amasa un poco hasta conseguir que no se pegue a la superficie. Después se cortan pequeñas porciones y a cada una se le va dando la forma típica del Roscón, normalmente ovalada. Una vez hecha la forma se dejan reposar durante 30 minutos y se precalienta el horno a una temperatura de 220 grados.
Paso 3: barnizando el Roscón.
Una vez que han reposado los roscones se barniza la parte superior con huevo batido. Para ello, el profesional utiliza una brocha especial de repostería con la que embadurna bien la parte de arriba del bollo en varias capas.
Paso 4: colocando la fruta escarchada.
Después del barnizado con huevo se procede a colocar la fruta escarchada de manera simétrica en la superficie del Roscón. Para ello se utilizan tiras de melón, naranja, piel de naranja, sandía o calabaza.
Paso 5: horneando el Roscón.
Una vez precalentado el horno y decorado el Roscón llega el momento de hornearlo. Para ello se reduce la temperatura a 170 grados y se deja unos 20 minutos hasta que adquiera ese color marrón característico.
Paso 6: rellenando el Roscón.
Después de sacar el Roscón del horno se procede a rellenarlo. Para ello se abre por la mitad y se introduce la nata, la trufa o el relleno que considere el repostero. También se colocará la figurita y el haba dentro del Roscón.
Paso 7: envasando el producto.
Después de rellenar el Roscón se procede a introducirlo en las cajas típicas que todos conocemos donde la parte de arriba es transparente para comprobar el aspecto del dulce.
Fruta de Navidad para la elaboración del Roscón de Reyes
Para elaborar un Roscón de Reyes de calidad es indispensable disponer de los mejores ingredientes con marcas líderes en el mercado como es el caso de Lazaya. Desde 1940 elabora la mejor fruta confitada con un amplio catálogo para profesionales como las cerezas confitadas, cubitos, tiras de piel, fruta en porciones o la deliciosa Fruta de Navidad, que es la más utilizada en el Roscón de Reyes, aunque también se emplea en la elaboración del Panettone y otros clásicos de la repostería.
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